EL JARDÍN BOTÁNICO
Antiguo Instituto Laboral con los campos de cultivo |
Nuestro
Centro, en sus inicios, fue un Instituto Laboral que impartía enseñanzas en la modalidad agrícola y ganadera. La parcela
de terreno que se encuentra entre los
edificios del Instituto y el campo de fútbol eran tierras de cultivo destinadas
a las actividades agrícolas que realizaban los alumnos. En este contexto se
crea el jardín botánico por el profesor César Cifuentes.
César
Cifuentes Martínez (1920-2008) fue catedrático, número 1 en su promoción,
en la modalidad agrícola y ganadera del
Bachillerato Laboral. Publicó cuatro libros de texto, dos de ellos premiados
por el ministerio de Educación, sobre organografía animal y vegetal, ganadería
y geología. Los dibujos a plumilla que ilustran las explicaciones sobre
anatomía y fisiología los realizaba a partir de muestras que él
mismo preparaba.
La
construcción del jardín la inicia en la década de los 60 del siglo pasado y a
lo largo de más de veinte años fue completándolo. Su propósito fundamental era
disponer de un aula en la propia naturaleza donde impartir las enseñanzas a sus
alumnos. Diseñó la estructura y recolectó cada una de las más de 400 especies
vegetales que componían el jardín. En sus visitas profesionales como
veterinario y en las vacaciones con su familia recolectaba especies que luego
pudiera utilizar en sus clases.
César Cifuentes con algunos de sus alumnos |
Los trabajos
en el jardín los realizaba en su tiempo libre contando con la colaboración de
algunos alumnos a los que había contagiado su entusiasmo por la naturaleza. Fue
un naturalista de vocación que consiguió trasmitir su pasión a muchos de sus
alumnos, algunos de los cuales se consideran sus discípulos. Su ilusión como docente era recoger cualquier
elemento natural para analizarlo, describirlo y clasificarlo.
En el jardín
construyó el primer monumento, homenaje al premio nobel Severo Ochoa. Actualmente sólo se
conserva el pedestal con la placa conmemorativa. Sobre el pedestal se podía
colocar una estructura de varios metros de altura, hecha con barras de metal y
escayola, que representaba la doble hélice del ADN.
El jardín ha
pasado por diferentes vicisitudes a lo largo de su historia. El curso pasado, a
iniciativa del Secretario de Centro y en colaboración con el taller de jardinería
del Ayuntamiento de Cangas de Onís, se realizaron unas obras de mejora de las
calles y parcelas que incluyen la colocación de unos paneles informativos de
las especies vegetales.
Esperamos
recuperar la idea inicial del profesor César Cifuentes y volver a utilizar este
espacio singular como un recurso educativo a disposición de profesores y alumnos.
En el
siguiente enlace podéis ver los vídeos
realizados por alumnos del Centro sobre algunas de las especies arbóreas de
nuestro jardín.